Cómo podrías
incorporar el método del Banco Común de Conocimientos a tu propia actividad: ya
sea en tu escuela, en tu trabajo, con tu familia o con tus amigos.
El avance permanente de la
tecnología y su incorporación en nuestra vida cotidiana nos exige el desarrollo
de competencias socio cognitivas para
aprender a aprender, para comunicarnos, para colaborar y participar en la
llamada Sociedad de la Información y del Conocimiento (SIC), para hacerlo es
necesario estar alfabetizados en el ámbito digital y de esta forma aprovechar y
potenciar verdaderamente los recursos en Internet.
El alumno requiere de destrezas
específicas para su supervivencia en este nuevo entorno: “La capacitación, no
sólo para encontrar información y saber discriminar entre ella, sino también
para colocar contenidos en las redes informáticas, se ha convertido en
requisito indispensable en la formación cultural, la competitividad laboral y
las opciones sociales de las personas”.
Los profesores de educación
básica no somos ajenos a esta realidad que le exige alfabetizarse en una
cultura digital de la que aún no forma parte, pero en la que sus alumnos se están
formando, y por tanto, necesita incorporar en su práctica docente metodologías que
le permitan proponer estrategias de enseñanza innovadoras con el uso didáctico las
tecnologías de la información y la comunicación (TIC’s). Una de ellas es la enseñanza
con y sobre blogs, que por su estructura permite gestionar información y extraer
sentido de la misma. El weblog,
blog, bitácora o diario en línea, es una alternativa de comunicación e
información personalizada en donde cualquier persona sin tener un dominio para
publicar y sin conocimientos en programación o diseño gráfico, puede tener su
propia página Web y gestionarla con sólo un nombre de usuario y una contraseña.
La estructura y funcionamiento de este servicio consisten en: Anotaciones
(historias o posts) ordenadas cronológicamente, cada una tiene una dirección
URL permanente (permalink), lo que facilita su enlace desde sitios externos.
Las historias pueden archivarse cronológica y temáticamente (por categorías) y suele
existir un buscador interno para facilitar su localización. La mayor parte de
las bitácoras incluye una selección de enlaces (blogroll) que recoge aquellos
sitios leídos o al menos recomendados por el autor, y alguna referencia
personal (about) que junto al título y descriptor de la bitácora, ayudan al
lector a situarla.